Contáctame y descubre cómo te puedo ayudar
Servicio dirigido a adolescentes con autismo que estén cursando Educación Secundaria Obligatoria (ESO), Bachillerato o Formación Profesional que necesiten un apoyo en el día a día para conseguir sus objetivos personales, académicos y profesionales.
Autorización nº S7924 para gestionar el Cheque Servicio de la CAM
¿Qué conseguiremos con la terapia?
Más habilidades sociales y emocionales
Más habilidades de comunicación social
Mayor independencia y autonomía
Mejor estado de ánimo y comportamiento
Mayor bienestar en el entorno escolar y social
¿En qué consiste la terapia?
En la terapia (presencial u online) con adolescentes con autismo (TEA) trabajamos los objetivos personales de cada uno, para conseguir una motivación y colaboración plena en la terapia, pudiendo abarcar todas estas áreas:
Área Social
Habilidades sociales
Comprensión de emociones y de los estados mentales (Teoría de la Mente)
Área de Comunicación y Lenguaje
Expresión y comprensión oral
Comprensión del lenguaje no literal (bromas, ironías, metáforas, etc.).
Área de Anticipación y Flexibilidad
Capacidad para adaptarse a los cambios en estas etapas educativas
Creatividad
Área de Autonomía
Autocuidado
Vida en el hogar
Saber desenvolverse en el instituto
Organización del estudio
Uso de recursos comunitarios
Área de Orientación Laboral
Metas laborales
Orientación vocacional
Apoyo en las primeras prácticas laborales
¿Quieres más información?
¿Cómo trabajo y qué metodología utilizo?
Evaluación inicial
Al principio, hago una evaluación global del adolescente, es decir, tanto a nivel cognitivo, como social, emocional, de autonomía y orientación vocacional.
Programa de intervención
En base a los resultados de la evaluación, establecemos conjuntamente unos objetivos claros.
Apoyo visual
Se utilizan agendas escritas, historias sociales y otros elementos visuales, adaptados a las necesidades y características de cada persona, que faciliten la comprensión del mundo social y la autonomía.
Psicología
También trabajo, con las personas que lo necesiten, problemas psicológicos (fobias, estado de ánimo, ansiedad, crisis vitales, etc.) o conductuales (problemas de alimentación, conducta, etc.).
Planificación Centrada en la Persona (PCP)
Es el marco en el que encuadro todas las terapias. Se basa en estos principios:
La persona es el centro del proceso y, por ello, el plan terapéutico se planifican en base a sus derechos, capacidades, prioridades y metas.
Dentro de la terapia, se incluye a la red de apoyo de la persona (familia, escuela y amigos)
El programa se adapta continuamente a las circunstancias de cada persona en cada momento de su v
Enlaces de interés relacionados con TEA
Adolescentes con autismo: ¿Cómo podemos ayudarlos desde el ámbito familiar?
La adolescencia es una etapa, de por sí, complicada. Es una etapa de muchos cambios en el aprendizaje y en el crecimiento, tanto físicos como psicológicos.
A nivel psicológico, la adolescencia es una etapa de desarrollo en la que se está en búsqueda de la propia identidad, de mucha inseguridad por estos cambios físicos y con las emociones a flor de piel. Los adolescentes buscan encajar en el grupo de amigos y tienen más en cuenta la opinión de sus iguales que de sus padres. Durante el tiempo de ocio, ya no hay tanto juego, sino que el tiempo que pasan entre compañeros es hablando, conociéndose y haciendo amistades. Además, suele haber un distanciamiento entre padres e hijos y hay más discusiones en la vida familiar, puesto que empiezan a cuestionar todas las normas que aprendieron cuando eran niños y pueden llegar a sentirse menos comprendidos.
Para los adolescentes con un diagnóstico de trastorno del espectro autista (TEA), a todo esto, se le añaden las dificultades para entender los cambios que están sufriendo en su cuerpo, así como para comprender las relaciones sociales, establecer amistades y reaccionar ante las situaciones que, desgraciadamente, se dan de acoso escolar durante la adolescencia.
Además, pasar a la etapa educativa de la ESO implica grandes cambios y requiere una mayor autonomía e independencia. Los profesores son distintos según la asignatura que imparten y cada profesor tiene su metodología, hay que cambiar de clase según la asignatura que toque, hay menos apoyos que en Primaria, etc.
También se le suma la necesidad de decidir a qué dedicarse profesionalmente cuando sean adultos: si continuar estudiando Bachillerato o iniciar una Formación Profesional.
Con lo cual, pasar a la adolescencia para los chicos o chicas con autismo no es tarea fácil, pero podemos ayudarle y hacerle el camino más sencillo.
Retos familiares para ayudar a adolescentes con TEA
Reto nº 1:
Como hemos mencionado anteriormente, los adolescentes con TEA tienen afecciones y dificultades en la socialización y en la comprensión del área emocional, es decir, tienen más dificultades para comprender qué se puede decir y qué no ante una determinada situación, qué normas sociales existen y hay que respetar para mantener la convivencia o la amistad, por qué una persona se ha podido molestar con nosotros, qué puede estar pensando esa persona, qué puede esperar de nosotros, etc.
Por otro lado, los adolescentes con trastorno del espectro autista tienen intereses restringidos, y les cuesta mantener una conversación de un tema que no sea de su interés o iniciar o mantener la conversación simplemente por ser amigable. También, tienen dificultades para ser conscientes en el momento de la conversación de que la otra persona se está aburriendo mientras le está contando algo que para él o ella es muy interesante.
¿Cómo abordar esta situación?
Debemos recabar su atención y explicarle de manera muy explícita las situaciones sociales, una a una: qué ha ocurrido, qué pensaba uno u otro, cómo se han sentido cada uno, por qué ha reaccionado de esa manera…y también debemos ayudarles a solucionar el problema, a buscar alternativas y decidir cuál sería la más adecuada en cada caso y por qué para mejorar su comportamiento.
Cuanto más mayor sea el adolescente con autismo, más complejas se convierten las situaciones socioemocionales: puede haber más personas implicadas y las emociones pasan a ser más complicadas. Por eso debemos explicárselo de manera progresiva.
Para explicar estas situaciones, podemos crear historias sociales en forma de cómic, representarlo a través del juego simbólico o mediante role-playing, explicar las situaciones que ocurran en películas, etc.
Por otro lado, es importante trabajar las habilidades sociales para iniciar y mantener una conversación, y ampliar la variedad de intereses a otros temas según su edad.
También debemos procurar que tenga las máximas oportunidades para relacionarse, compartir aficiones con otros adolescentes y mejorar por tanto su interacción social y su comunicación. Es decir, si, por ejemplo, le gusta el deporte o la tecnología y le apetecería ir a clases, podemos valorar la idea de que acuda a alguna clase en donde haya chicos de su misma edad. Es importante no presionar, pues no queremos provocar el efecto contrario y debemos respetar también su decisión.
Reto nº 2:
Por otro lado, hay adolescentes que no comprenden los cambios que está teniendo su cuerpo y sus necesidades sexuales. ¿Qué podemos hacer entonces?
No debemos tener miedo de explicarle a las personas con tea el cuerpo humano y sus necesidades sexuales. No por evitar hablar del tema va a desaparecer esa necesidad. De hecho, si no se habla de ello y no se explica, puede desembocar en conductas socialmente inaceptables, porque no saben qué comportamientos se tienen que hacer en la intimidad y cuáles no, y en problemas de conducta (irritabilidad) o ansiedad. Sabemos que es un tema delicado. Por eso, si no sabes por dónde empezar y necesitas asesoramiento o ayuda al respecto, puedes contar con nosotros.
Reto nº 3:
Para manejarse mejor en el instituto o colegio, podemos ayudarles anticipándoles con un horario de las clases, dónde se imparten cada una, darles estrategias para preguntar en caso de que se encuentren perdidos/as, etc.
Reto nº 4:
Y en cuanto al área laboral, sería necesario indagar qué intereses tiene el adolescente y qué formación se puede adecuar a sus necesidades. Por otro lado, debido a las dificultades que tienen los adolescentes con autismo para imaginar aquello que nunca han vivido, sería muy beneficioso poder experimentar por un tiempo cómo sería trabajar en el sector que, a priori, le motiva, y poder contar con un apoyo que le ayude a hacer la transición.
Si tu hijo presenta síntomas o signos de autismo, si crees que requiere un tratamiento específico y necesitas que te ayudemos, no dudes en contar con nosotros.